En el sector de las máquinas automáticas, la calidad de los componentes y de los tratamientos a los que se someten es esencial para garantizar su duración y eficacia. Microline somete cada componente a determinados procesos como el galvanizado, el teflonado, el niquelado, el bruñido y la pintura. Cada uno de estos tratamientos desempeña un rol fundamental: por ejemplo, el galvanizado protege contra la corrosión, mientras que el teflonado reduce la fricción, mejorando las prestaciones generales de las máquinas. Estas medidas garantizan una mayor resistencia al desgaste y hacen que las máquinas no solo sean más duraderas, sino también más seguras y eficaces. Precisamente gracias a estos tratamientos, Microline puede garantizar a sus clientes soluciones fiables, capaces de funcionar durante largos ciclos de producción sin comprometer la calidad ni la precisión de los resultados. La atención al detalle durante la fabricación y el tratamiento de los componentes da lugar, por tanto, a máquinas que ofrecen óptimas prestaciones incluso en condiciones de uso intensivo, garantizando a la vez bajos costes de mantenimiento y mayor sostenibilidad operativa.